MENSAJE PARA EL CIUDADANO DE LA CALLE

ELECCIONES

Mensaje para el ciudadano de la calle (1/2)

Por Leofermont

P

ara ti, para él, para ella, para todos aquellos a los que elección tras elección nos roban el voto.

La política como tema, es extensa e intensa. Hay muchos tiradores y pocos son los huesos… pero más poco es el talento para desempeñarlos. Para prueba ahí está Layín que no se raja: Como administrador municipal resultó todo un fracaso; como político, todo un fraude enzapatado. Su partido lo propuso como el solucionador de la problemática de San Blas, porque es hombre de empresa, con mucho dinero, que no ocupaba rasguñar del presupuesto, y ahí lo tienen ustedes: no hizo obra pública alguna. Al menos eso se muestra a simple vista. Porque darle trabajo temporal a un grupo de gentes (con recursos federales) o “regalar despensas” a grupos más pequeños, o realizar una rifa de autitos (muy poco clara por cierto) no resuelve ningún problema. Sólo compromete a los que aceptan atan humillantes limosnas. La verdad, es que no cumplió con ningún punto de los que prometió en campaña.

Eso sí, trató al pueblo con las patas. Es una queja generalizada. Promovió su imagen trepado en una bestia, cosa que puede verse en algunos cruceros en imagen ampliada, no para fomentar el turismo para San Blas, sino para adelantar su campaña par a diputado local.

Dado su triste y mísero papelito como presidente burricipal, dependerá del ciudadano de la calle, como tú, que esto  lees, que este sujeto no logre ocupar otro hueso nunca más. ¡Imagínatelo como diputado o como gobernador!

Este artículo no está destinado a denostar ni atacar al tan famoso Layín… aunque se lo ha ganado a pulso. Este escrito tiene otro propósito, más amplio aun: recordarle al lector, al ciudadano de la calle, que en el próximo circo político electoral no sólo razone su voto… ¡Que lo cuide! Que exija respeto y honestidad por parte de las fieras venales del Instituto (prostituto) Electoral   local. Porque ahora como ayer (en el 2008), el mencionado instituto te va a imponer como ganón al chico más malo de la película gacha (al candidato favorito de Layín para garantizar otros tres años de continuidad layina. ¡No te dejes!

Los políticos son aves de paso; el constante eres tú, ciudadano, porque con tu trabajo (y los impuestos que genera), sostienes al municipio, al Estado y hasta la Nación.

No permitas que los parásitos políticos rapiñeros te sigan vampireando.¤